Pueblo Oaxaqueño:
Por medio de esta carta, quiero mantener mi apoyo y repudio contra el gobierno foxista. Me entristece la cobardía para resolver el problema que, a mi parecer, sólo es menester el diálogo y no el uso de las armas. El gobierno panista ha aprendido muy bien de su mentor: El PRI.
El sobrevuelo de las aeronaves militares me recuerda lo sucedido, exactamente, hace 38 años: la matanza estudiantil. Carlos Abascal, la viva representación de la Represión y la intolerancia, debe jurar, al igual que el gobernador --nota, Ulises ya debe renunciar por el bien de su pueblo, pero como veo, le importa más ganar una gran cantidad de dinero que aquellos que votaron por él -- y "Don Botas" (para los cuates, Fox), que no habrá represalia alguna en la sociedad oaxaqueña, porque sí esto sucede, Calderón será el Imbécil que deberá controlar el movimiento social que suscitará dentro de poco.
La bomba ya está puesta desde meses, pero las únicas personas que pueden desactivarla, es el señor gobernador (le suplico que renuncie y se deje de pendejadas ¿acaso quiere perjudicar gravemente a Oaxaca, el pueblo de Juárez?) y Monsieur Abascal que utilice la razón (no la misma que usó cuando reprimió a la maestra de su hija cuando les puso a leer Aura, de Carlos Fuentes) porque se va arrepentir y su "diosito" lo va mandar al hoyo, mejor conocido como el infierno. Por favor, les suplico a las autoridades que usen la razón y la inteligencia y no repitan lo que sucedió en la Plaza de las Tres Culturas; Abascal y Fox tienen la oportunidad de no ser la copia "barata" de Luis Echeverría y Díaz Ordaz (pongo al final al imbécil presidente, por el simple hecho que, como muchos, siento un gran desprecio y rencor).
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